Su denominación múltiple mercado- polideportivo-biblioteca
Antes
Después
Proyecto: 2008
Construcción: 2009-2011
Situación: Ayuntamiento de Madrid, España
Arquitectos: Nieto Sobejano Arquitectos, S.L.P.
(Fuensanta Nieto – Enrique Sobejano)
Arquitectos del proyecto: Alfredo Baladrón, Alexandra
Sobral
Coordinación del Proyecto: Patricia Grande
Dirección de Obra: Nieto Sobejano Arquitectos S.L.P (Fuensanta
Nieto – Enrique Sobejano)/ Miguel Mesas Izquierdo, Aparejador
Estructura: NB 35 S.L
Instalaciones: 3i Ingeniería Industrial, S.L
Ingeniería de Fachadas: Ove Arup & Partners
Empresa constructora: U.T.E Acciona/ Dragados
La construcción del nuevo Mercado Barceló ubicado entre las calles Mejía Lequerica y Beneficencia, comprende espacios públicos, edificios e instalaciones temporales que forman parte del mismo conjunto. El conjunto edificado se articula en tres volúmenes independientes conectados a una nueva plaza pública. Teniendo como protagonista una calle – galería interior de acusada proporción vertical que evoca algunos espacios comerciales urbanos del pasado y concentra las articulaciones verticales y horizontales del conjunto. El pabellón polideportivo se asoma en vuelo por encima del mercado, cuya cubierta es en realidad una gran plaza elevada desde la que se divisan los tejados de Madrid. La nueva biblioteca pública sobrevuela el patio del colegio al que se adosa para formar parte de un conjunto urbano, compartiendo materiales y volumetría con el mercado y polideportivo.
La expresión geométrica y material de los
distintos edificios y sus cerramientos anuncian que -pese a sus diferentes
usos- las nuevas edificaciones pertenecen a un mismo tiempo y lugar. Un
cerramiento de piezas de vidrio moldeado en grandes dimensiones, -blanco y
opalino- unifica el tratamiento de todos los nuevos edificios públicos
-mercado, polideportivo, biblioteca- otorgando ligereza y unidad al conjunto.
El tratamiento de los espacios públicos en las plazas de Alonso Martínez y
Barceló, así como en las calles adyacentes, su común pavimentación y mobiliario
urbano, inducirán al ciudadano a percibir la radical y a un tiempo sutil
transformación que ha tenido lugar en su barrio.
Con espacios para habitar,
estudiar y enseñar, comprar, divertirse, hacer deporte, leer, pasear o
descansar forman parte de una escena común, los nuevos edificios y áreas al
aire libre conforman un inesperado puzle en el que cada elemento distinto acaba
cobrando sentido solo cuando todos ellos han sido ubicados en su lugar preciso.
El mercado
Es una elevada
galería cubierta de gran de altura, donde esbeltas escaleras mecánicas suben y
bajan hacia la terraza y los comercios de las plantas superiores, invitando a
los paseantes a atravesar el edificio desde la calle Mejía Lequerica hacia la
nueva plaza posterior. Grandes paños de vidrio dejan ver los puestos de mercado
que se disponen en bandas paralelas de amplias calles interiores. Tanto si se
entra al mercado desde la calle como si se hace desde la plaza, un vacío
vertical hace percibir al usuario la dimensión espacial en las tres plantas que
abarca el local. Un conjunto de escaleras paralelas a la galería conecta los
diferentes niveles, mientras que un núcleo compacto de montacargas, ascensores
y aseos comunica las plantas en toda su altura, incluso hasta los sótanos de
almacenes, carga/descarga y aparcamiento. El cerramiento exterior está formado
por piezas lineales de vidrio moldeado blanco en U, de 50 cm de anchura,
formando una piel continua opalina que envuelve todos los edificios del
conjunto.
Polideportivo
Situado sobre
los tejados de Madrid. La cubierta del mercado es en realidad una gran plaza de
1500 m2. Un núcleo de comunicación independiente y una larga rampa mecánica han
permitido llegar directamente a este nivel, donde también se ubican vestuarios,
aseos, control y acceso a la zona deportiva. Los escolares del colegio vecino
acceden directamente desde el patio de la escuela por medio de una conexión
subterránea. Un café acristalado queda bajo una gran losa sobre la que se sitúa
el pabellón cubierto. El núcleo de comunicaciones llega hasta el último nivel
dividiendo el espacio en dos áreas: las salas de gimnasia hacia la calle
Barceló y el pabellón polideportivo propiamente dicho, abierto a través de un
gigantesco ventanal de 32 metros de longitud hacia las azoteas de la ciudad.
Biblioteca
Configura en su
volumen lineal una nueva manzana con el colegio existente al que complementa.
Concebida como un edificio-puente, libera el espacio inferior para ampliar el
patio de juegos del colegio, apoyándose en dos cuerpos que albergan los núcleos
de comunicación, acceso y servicios. De este modo, las dos plantas superiores
longitudinales permiten la ubicación de los espacios de lectura y reunión del
programa, con distintas configuraciones posibles. Comparte materiales de cerramiento
con el mercado y polideportivo, admitiendo de este modo la presencia de una luz
natural tamizada en las áreas interiores de lectura.
Mercado Temporal
La
construcción del mercado temporal que estará en servicio durante el período de
ejecución de las obras de los nuevos edificios, se ha planteado como una
instalación urbana reciclable que exprese la capacidad de transformación que
una intervención temporal puede inducir en su entorno. Ante la necesidad de
albergar los numerosos puestos de venta que se habían de mantener, el conjunto
se fragmenta en seis volúmenes de planta pentagonal, de diferentes alturas y
dimensiones, evitando de este modo la presencia de un volumen excesivo respecto
a los edificios que lo circundan. Un cuerpo lineal de dos alturas alineado a la
calle Beneficencia, albergará las zonas de carga y descarga, almacenes, cámaras
frigoríficas e instalaciones. Aspecto fundamental de esta instalación es su
cerramiento exterior de policarbonato translúcido que envolverá los cilindros poligonales
permitiendo el paso de la luz natural durante el día y transformándose en
grandes linternas que iluminan la plaza durante las horas nocturnas. Una vez
terminadas las obras, los cilindros del mercado temporal se desmontarán, y
podrán ubicarse en algún otro lugar de la ciudad, de modo que la nueva plaza de
Barceló, con similar pavimentación, ajardinamiento y mobiliario urbano al de su
entorno, completará la transformación llevada a cabo en esta área histórica de
Madrid.
Espacios exteriores
El barrio
recuperará nuevos espacios para los peatones. Los coches han sido limitados a
dos vías en la calle Barceló y Mejía Lequerica, mientras que pavimentos de
granito y zonas ajardinadas tapizan las calles Beneficencia, los espacios
urbanos intersticiales y las nuevas áreas al aire libre. En la plaza de Alonso
Martínez el tráfico de vehículos se mantiene únicamente en el eje de la calle,
creando un amplio salón urbano muy arbolado. Las ligeras pendientes
superficiales definen planos pavimentados, con áreas de juegos y descanso,
entre las que surgen los árboles actualmente existentes y las nuevas
plantaciones. El mobiliario urbano responde al mismo sistema geométrico
poligonal con que se ha proyectado el mercado temporal, estableciéndose así
lecturas paralelas en todo el ámbito de actuación que el paseante reconoce
inconscientemente.
Fuente
Imagina, Diseña, Construye & Habita